viernes, 29 de agosto de 2008

Conciencia ética un valor inigualable


Desde la época primitiva el hombre necesitaba relacionarse para poder subsistir, vivía en armonía consigo mismo y con los demás, las relaciones se caracterizaban de cooperación y de ayuda mutuo, no existían clases sociales, esto les permitía crecer espiritualmente, ya que estaban acostumbrados a compartir y a ser serviciales llevándolos a cultivarse con valores sociales, éticos y humanos, con el paso del tiempo estas relaciones se volvieron complejas, llevándonos a relaciones violentas donde se tenía que luchar cuerpo a cuerpo para sobrevivir, por consecuencia los valores se fueron perdiendo.
Con el pasar de los años y con los desarrollos tecnológicos han contribuido para que el comportamiento del hombre se vea afectado a consecuencia de ellos, encaminándonos a situaciones de agresividad, deshonestidad y de incomprensión consigo mismo y con los demás, creando una atmosfera que cada día nos afecta más.
Nos vamos alejando de todo lo bueno, de la fe, del respeto, de la honestidad y sobre todo de los valores humanos, lo peor es que no queremos darnos cuenta de lo que está pasando a nuestro alrededor, los investigadores cometen plagio demostrando no tener ética, los alumnos que son el futuro de nuestro no quieren aprender nada, no les interesa cultivarse y se vuelven con el tiempo groseros y altaneros, no les interesa enriquecer el alma, en las familias cada día suman más las que se destruyen por egoísmo, por ambición, corrupción, falta de incomprensión, dentro de los hogares los padres de familia se destruyen día con día, ocasionando un desorden a sus hijos, lo que los orilla a robar, utilizar drogas, y todo esto por consecuencia a destruirse por completo.
Después de realizar la lectura de “El Plagio en el trabajo científico” de Rojas Soriano Raúl (1992), el autor me lleva a reflexionar cuan equivocada estaba al pensar que cuando uno comete plagio, es por falta de conocimientos, ya que en mi vida como estudiante lo más seguro es que lo cometí alguna vez por ignorancia, pero ¿cómo puedo imaginarme que científicos, investigadores y personalidades que se dedican precisamente a realizar estudios muy avanzados puedan cometerlo?, si son personas con conocimientos firmes y que durante años, dedican sus vidas enfocadas al estudio siendo personas muy preparadas, ¿cómo es que se atreven a cometer plagio?, la mayoría de ellas por egoístas, y por aparentar lo que no son, dando a los demás una imagen falsa de lo que pretenden ser, o simplemente, por mantenerse en un status social, para no permitir la entrada a otras personas que a lo mejor, si cuentan con los conocimientos necesarios, y los recursos, para situarse en lugares prestigiados dentro de nuestro entorno social, esto me lleva a reafirmar que las personas que están plagiando, son individuos carentes de conciencia ética, y evidenciando que como seres humanos, no cuentan con los valores morales suficientes que debemos de demostrar ante estas situaciones, para no vernos afectados, como investigadores, considero que sería importante que se destinaran mayores recursos a la investigación, para promover los valores y la ética dentro de este ámbito, y concientizarlos para que sean personas cultas, preparadas, y honestas al realizar su trabajo, demostrando que se pueden confiar en ellos.
Al leer la experiencia del autor me remonta a mis inicios como maestra en donde por primera vez me di cuenta de que un alumno, plagió un trabajo de otro compañero, cuando lo descubrí, lo llame y le dije que el trabajo que me estaba presentando era exactamente igual al de otro compañero, que hace un año había tomado la clase conmigo, él se quedo mudo, en ese momento y no supo que decir solo tomo su trabajo y se fue, días más tardes me comento que lo había hecho porque no imagino las consecuencias que esto le traería, que de ver sabido, mejor no hago nada y me evito problemas; me lo dijo muy despreciativamente. Esto me lleva a reflexionar lo mal que están algunos jóvenes, hoy en día, no les importa nada lo único que quieren es no hacer nada, todo lo que existe a su alrededor no les importa, no demuestran esa chispa por aprender algo nuevo, esa responsabilidad al realizar sus actividades, que tristeza que a esa edad ya tengan esos pensamientos, me imagino que así fueron algunos de los investigadores en su época de estudiante, y que a base de tropiezos y malas mañas lograron una fama falsa.
Nosotros como maestros además de proporcionarles, procedimientos, métodos, conceptos y conocimientos debemos de implementar que por lo menos una vez a la semana, interactuar con ellos abordando lo importante que son los valores que están recibiendo dentro de su hogar, ya que estos nos ayudaran a ser mejores, claro esto aplicado mediante una dinámica que nos permita a nosotros imaginarnos los problemas a los que se están enfrentando, orientándolos, para obtener un mayor rendimiento académico y por supuesto un enriquecimiento del alma, que nos lleve a una mejor comprensión dentro del aula de clases.
En lo general me he topado, que las personas, que tienen actitudes deshonestas, y son, en la mayoría de las ocasiones, gente con solvencia económica muy estable, que obtienen buenos puestos gracias a que mi papi tiene influencias y logro un trabajo prestigiado para su hijo, raras, son las personas que a base de esfuerzos logran obtener por méritos propios puestos muy importantes, es mas creo que a la mayoría de las personas no les interesa sentirse satisfechos por los logros obtenidos por sus propios méritos, les da igual, es como si no comprendieran como humanos, como si les gustara ser corruptos, esto me lleva a recordar la lectura de “Los siete saberes necesarios para la educación del futuro” de Edgar Morín (1999), en el capítulo IV, donde nos hace reflexionar sobre la importancia de la comprensión humana, que es la más difícil de aprender y la que es importante integrar a la educación, menciona que uno adquiere diversos conocimientos prácticos, teóricos, pero, el sentido espiritual que nos lleva a tomar conciencia de lo que realizamos diariamente a ser honestos consigo mismos, eso, es lo más difícil de entender y por consecuencia de aplicar, en nuestra vida diaria.
Hoy en día nos enfrentamos a avances significativos como lo son el uso de las computadoras, el internet, los teléfonos celulares, educación a distancia, solo por mencionar unos cuantos, pero estos nos alejan más de la comunicación que debe de existir entre los seres humanos, la familia, el trabajo, los amigos, en fin en nuestro entorno social; y pienso como un investigador en sus inicios, que esto nos lleva a degradar cada vez mas nuestras relaciones, a ser personas sin escrúpulos para obtener lo que quiero sin importar lo que tenga que hacer, no estoy mencionando que los cambios tecnológicos con los que contamos no sean buenos sino al contrario, cuando son empleados correctamente y no abusamos de ellos nos facilitan nuestras actividades, pero el uso exagerado de ellos nos lleva a degradar los lazos que fortalecen nuestro espíritu, convirtiéndonos en personas carentes de valores.
Si bien es cierto que la educación comienza en casa, nuestros padres tienen el compromiso de fomentar en nosotros esos valores que pareciera que se han perdido, de cultivar con sus acciones la comprensión dentro del hogar, aunque esto en la mayoría de los casos no se da, ya que desafortunadamente todos los días nos enfrentamos a los problemas que se dan en nuestro hogar por falta de amor, de incomprensión por parte de nuestros padres, llevándonos a recibir maltratos, humillaciones y desprecios que marcan considerablemente nuestras vidas, orillándonos a actuar con acciones negativas hacia la sociedad ante determinadas situaciones que no nos gustan o por las que simplemente no estamos de acuerdo, conduciéndonos al egocentrismo, etnocentrismo y sociocentrismo, donde actuamos erróneamente al pensar que todos los demás tienen la culpa de lo que me está sucediendo en estos momentos, dejándonos caer en una mentira, la cual nos lleva a situaciones inesperadas y poco favorables en nuestro entorno social.
Esto me lleva a reflexionar sobre el papel que juega la familia como núcleo formador y de lo importante que es para cualquier ser humano que este, no se vea afectado por los problemas de la vida diaria; nosotros en apoyo a la formación de las futuras generaciones, debemos de dedicarnos con mayor esmero a cultivar en nuestros hijos los valores que debemos de tener como seres humanos, la comprensión del alma y por consecuencia la ética que debemos de demostrar siempre; ¿cuál sería el primer paso? Dedicando un poco más de tiempo a la familia, promoviendo en ella reuniones donde cada miembro exprese sus inquietudes, sus emociones y por qué no, sus desacuerdos, para que juntos traten de mantenerse unidos y darle solución a lo que se nos presenta día a día en nuestro entorno, esto nos va a permitir la unión familiar y por consecuencia ser buenos formadores, dejándole a nuestro país, buenos ciudadanos que sean capaces de realizar cualquier actividad con honestidad y siempre con el deseo firme de comprender a los demás, logrando ser cada día mejores seres humanos.

CONCLUSIÓN
Actualmente cometemos errores al realizar nuestro trabajo como investigadores, ya que muy frecuentemente, a pesar de lo dicho y de lo que ya se sabe, se sigue cometiendo el plagio en todos los niveles.
El núcleo de la sociedad, que es la familia, representa el punto medular en la perdida de los valores morales que permiten que se mantenga la armonía entre los seres humanos.
Debemos de tomar conciencia, todos tenemos algo bueno que compartir, y poner de nuestra parte para que las relaciones vayan mejorando, no importa donde sea, en nuestro trabajo, con nuestra familia y en el hogar.
Si logramos ser mas consientes al tratar de comprender a los demás vamos a lograr rescatar los valores humanos promoviendo siempre una actitud de respeto, de honestidad, de integridad, de lealtad, de ética.


Y concluyo con lo siguiente: “El éxito de todo hombre es su familia, su mayor riqueza los valores que les proporciona”.





REFERENCIAS

Morín, E. (UNESCO 1999) “Los siete saberes necesarios para la educación del futuro”. Consultado en Agosto 27, 2008, se accede con la liga:
http://www.udlap.mx/rsu/pdf/1/LosSieteSaberesNecesariosParaLaEdudelFuturo.pdf.

Rojas, R. (1992). “Plagio en el trabajo científico”. Consultado en Agosto 20, 2008 de la página del CECTE, se accede con la liga:
http://web.cecte.orbis.org.mx

1 comentario:

reyna hernández dijo...

Hola Marcela, quiero comentarte que me gusto el enfoque que le diste a tu trabajo sobre la ética y coincido contigo en lo grave que reulta que en el núcleo familiar se pierda ese sentido de pertenencia. Lamentablemente considero que es consecuencia de la misma sociedad globalizada la que nos lleva a esta situación. Ojalá se pueda hacer algo desde nuestras aulas. Felicitaciones tienes comentarios muy ineresantes a lo largo de tus trabajos.